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Getafe 3 Betis 1 por acosart
El Getafe pasó por encima del Betis, al que goleó por 3-1. Le bastó con media hora de exhibición de Pedro León -autor de dos goles- y Colunga -firmó el tercero- para atropellar a un Betis irreconocible. El murciano se retiró lesionado a los 34 minutos de partido, pero con los deberes más que hechos. El Betis no fue capaz ni de marcar su gol. Fue Rafa, en propia puerta, el que otorgó el tanto a los sevillanos.
Se encontró el Betis con un huracán en el Coliseum. Saltó al césped madrileño con la cabeza en otro sitio y lo pagó caro. Cuando quiso darse cuenta de que ya no estaba en el hotel de concentración, perdía 3-0. Todo por culpa de un Getafe que salió con el cuchillo entre los dientes.
Fue el partido de Pedro León y Colunga, indudablemente, pero también el de hombres como Sarabia o Borja, de los que no se hablará tanto.
Tras un par de buenas ocasiones para los azulones, Pedro León inauguró el marcador con el golazo de la jornada. Prácticamente desde el centro del campo sorprendió a Sara. El portero bético no tuvo su tarde, precisamente.
Pasados los 20 minutos del encuentro, Pedro León repitió tras una buena asistencia de Adrián Colunga. El asturiano, por cierto, sería el que marcase el tercero antes de la media hora de encuentro.
Todo, prácticamente, pasó en esos primeros 30 minutos. Hasta tiempo le dio a Pedro León a lesionarse. No tiene pinta de nada serio, pero Luis García prefirió cuidarlo con el partido casi decidido.
Al Betis le dio por reaccionar en la segunda parte, cuando ya era demasiado tarde. En los primeros 45 minutos no fue capaz de probar ni una sola vez a Moyá.
La entrada de Cedrick en el campo le dio otro aire a los andaluces. Jorge Molina, que había estado solo ante el peligro, lo agradeció, pero ya era imposible levantar el partido. Rafa, en propia puerta tras un centro de Verdú, puso el de la honra para los béticos en el marcador.
Con esta victoria, los madrileños coquetean con Europa y, lo que es más importante, suman ya un buen puñado de puntos para lograr el objetivo de la permanencia. El Betis, en cambio, no levanta el vuelo. (Marca)
Betis 1 Villarreal 0 por jordixana
La imbatibilidad del Villarreal terminó en la séptima jornada, en el Benito Villamarín (1-0), tras un partido que deparó menos de lo que se esperaba. Lo decidió un gol de Nosa, que fue más rápido que la defensa visitante tras un rechace de Asenjo. No fue un buen encuentro, y eso que sobre el césped había buenos futbolistas. El Villarreal, que antes del tanto de Nosa se topó en un par de ocasiones son Sara, perdió por primera vez en Liga. El Betis suma una victoria que necesitaba para no descolgarse.
De nuevo, Cani dejó algunos detalles maravillosos
Betis y Villarreal son dos equipos alegres, por eso supo a poco su actuación. El equipo de Marcelino empezó bien, ambicioso, dispuesto a jugar en el campo de su rival, con Cani al mando de las operaciones, y tuvo un par de buenas ocasiones que desbarató Sara. Por lo visto hasta el momento, el portero parece un acierto del Betis. Repelió con el pie un remate de Mario y tapó bien otro de Uche sin apenas ángulo. Tiene buenos centrocampistas el Villarreal y gente hábil, capaz de quitarse de encima a rivales con un regate o un pase filtrado. Especialmente dulce es el momento de Cani, que volvió a ser el mejor de su equipo. Dejó un par de jugadas maravillosas, sobre todo una que terminó con un empujón de Lolo Reyes dentro del área. Delgado Ferreiro se hizo el longuis. En esa acción, Cani volvió loco a Chica y luego tiró un caño a Amaya. Una delicia.
El Betis fue igualando el partido poco a poco, agarrado sobre todo a Vadillo. El extremo dio mucho trabajo a Jokic. No siempre consiguió superarle, pero durante la primera parte lo intentó sin desmayo, muy participativo. De sus botas nació la jugada del gol. Amaya cruzó un buen pase, Vadillo controló perfectamente y su disparo salió rechazado. Apareció Verdú por la frontal y su disparo lo repelió Asenjo. El balón fue al medio y Nosa estuvo más rápido que nadie para empujar a gol. No le hizo falta demasiado al Betis para marcar, aunque antes había tenido un par de ocasiones decentes bien solventadas por Asenjo.
En la primera parte el Betis se agarró a Vadillo, muy participativo
El Villarreal fue bajando el pistón, tocado por el gol. No tuvo la misma fe en su juego que otras veces. Marcelino hizo algún cambio en el once ante la carga de partidos. No salió de inicio Gio, que hizo su aparición en la segunda parte, cuando el Betis esperaba bien puesto atrás, dispuesto a asestar el golpe definitivo en una contra. No estuvo fino en ese aspecto Verdú, desacertado en dos o tres pases cuando tenía espacios, algo extraño en él. Finalmente trenzó una buena jugada con Jorge Molina, pero no acertó en el mano a mano ante Asenjo. En el otro área, Paulao y Amaya se fueron agigantando y terminaron el partido pletóricos, ganando los duelos a quien se pusiera por delante.
El Villarreal lo intentó hasta el final con algun córner, pero no era su noche. No contó con la aportación habitual de gente como Pereira y Aquino. El mexicano cayó en el área a última hora y a Marcelino se lo llevaron los demonios, pero no pareció que hubiera gran cosa en esa acción. El Villarreal ya sabe lo que es sangrar en su regreso a Primera. (Marca)
Athletic Bilbao 2 Betis 1 por jordixana
Territorio de grandes noches futboleras, de partidos épicos y resultados imposibles, el nuevo San Mamés ya dispone de su primer recuerdo emocionante. El Athletic tiró de casta ante el Betis y remontó un partido que se le había complicado con el tanto de Jorge Molina. De Marcos y San José añadieron al caliente corazón rojiblanco un poco de cabeza y el Athletic volvió a ganar en casa. Hogar del que nunca se fue.
Se escribe una nueva historia y las primeras líneas apuntan alto. Como en cada relato, se antoja necesario la existencia de un héroe que desarrolle la trama y despierte admiración. En San Mamés esa figura es, hoy por hoy, la de Ibai Gómez. Bajo su dirección, el Athletic castigó a un pobre Betis que a punto estuvo de salir indemne de su visita a Bilbao.
Con Aduriz deprimido, De Marcos descansando y Susaeta perdido en batallas de relativa trascendencia, Ibai imaginó mientras el resto se apagaba, desbordó cuando el resto se topaban con la zaga verdiblanca y alegró a su equipo y la afición de San Mamés cuando la tristeza se apoderaba de los corazones rojiblancos.
Fue el único elemento desestabilizador ante un Betis excesivamente conservador. Mel se dejó, de nuevo, a Nosa, Verdú y Cedrick en el banquillo y se limitó a esperar su momento. Lo tuvo en la primera mitad con un disparo de Matilla que desbarató Iraizoz y con el tanto de Jorge Molina en la segunda, con una intervención menos acertada del meta rojiblanco. Ese fue el balance verdiblanco, que incluso pudo llevarse los tres puntos con otra acción de Jorge Molina que acabó en el palo. Tres acciones, y poco más.
De Marcos, el agitador
Ese poco, que fue mucho, apareció en la portería del Betis. Entre Sara y los palos se sostuvo la esperanza verdiblanca. La madera hizo su trabajo al filo del descanso ante Ibai y Gurpegi. Sara hizo lo propio con un preciso disparo de Susaeta y un penalti que evitó el dilema moral de Beñat.
El golpe posterior de Jorge Molina encontró respuesta en el banquillo. Valverde dio entrada a De Marcos, visceral, rematador y con un recorrido decisivo. Fue él quien reactivo al Athletic con un oportuno cabezazo. Poco más tarde, San José confirmó que el conjunto vasco está muy bien de la azotea. Ahí arriba se acomoda en este arranque de Liga, lugar donde el Betis vivió no hace tanto tiempo, pero que ahora está lejos de ocupar. (Marca)
